Uno de los tópicos principales durante esta semana en el mundo de la NFL ha girado en torno a la pregunta que le da titulo a esta columna: ¿habrá sorpresas en los Juegos Divisionales? Y si la respuesta es afirmativa: ¿qué equipos harán la “chica”?
Tras lo que vivimos en la temporada regular, en la que los dos mejores equipos de cada Conferencia, Americana y Nacional, estuvieron muy por arriba del resto, creo que en estos playoffs las sorpresas estaban reservadas para los Juegos de Comodines y, si acaso, la única que queda es la que sostengo respecto a que los Potros de Indianápolis vencerán a los Patriotas de Nueva Inglaterra en la final de la AFC, aunque de eso hablaré a detalle hasta la próxima semana.
Seattle en Green Bay
El inexistente ataque terrestre de los Halcones Marinos es su principal obstáculo para pensar en una sorpresa en Lambeau Field, donde el frío, el viento y la dura defensiva de los Empacadores complicará el accionar de Matt Hasselbeck.
La discusión sobre este juego se ha centrado en el duelo entre la dupla de esquineros de los Packers, Charles Woodson y Al Harris, ante el cuerpo de receptores de Seattle, cumplidor, pero carente de un “playmaker”; sin embargo, creo que los locales ganarán la batalla con su frontal, muy eficiente para presionar a los quarterbacks, encabezada por Kabeer Gbaja-Biamila (10 capturas) y Aaron Kampman (12).
La experiencia es la mejor arma de los Seahawks, empezando por su entrenador en jefe, Mike Holmgren, y aunque no creo que pierdan por los nueve puntos que pronostican las casas de apuestas, sí pienso que hasta aquí llegaron.
Jacksonville en Nueva Inglaterra
En algún momento de la temporada regular mencioné que los Jaguares podían eliminar a los Patriotas, pero después de lo que vi la semana pasada en Pittsburgh me retracto, ya que la inexperiencia de los felinos y, sobre todo, la falta de credibilidad en su quarterback, David Garrard, terminarán por hundirlos.
Creo que Jacksonville se mantendrá en la pelea con su dura defensiva y poderoso juego terrestre, pero una vez que Nueva Inglaterra abra la diferencia en el marcador, con los acostumbrados bombazos de Tom Brady a Randy Moss, Garrard no tiene ni el brazo ni el carácter para conducir a los Jaguares a una remontada.
Pese a todo, al igual que en el desafío anterior, considero que los Patriotas no cubrirán la línea de 13.5 puntos por la que son favoritos en Las Vegas.
San Diego en Indianápolis
Todos los analistas hemos hablado de la victoria de los Cargadores sobre los Potros del pasado 11 de noviembre, pero, a mi gusto, éste es el choque más engañoso del fin de semana y, por lo tanto, el único en el que el marcador tendrá una diferencia mayor a 10 puntos. ¿Por qué? Muy simple.
Ni Peyton Manning volverá a lanzar seis intercepciones –de hecho no sufrirá ni una– ni Darren Sproles devolverá dos patadas para touchdown –no pisará las diagonales– ni Adam Vinatieri fallara otro gol de campo tan corto (29 yardas) en caso de que sea el decisivo para la victoria.
Esta vez los Colts están casi completos (la única baja es Dwight Freeney y Marvin Harrison está en duda) y, algo muy importante, jugarán en su domo, donde no hay lluvia ni viento ni frío, por lo que espero una victoria contundente de los campeones defensores, al menos por dos touchdowns de diferencia.
NY Gigantes en Dallas
Este es el partido en el que más colegas apuntan hacia una sorpresa, basados en el estado físico de Terrell Owens, quien intenta recuperarse de un tobillo torcido, pero, sobre todo, porque el quarterback Tony Romo hizo un viaje a México el fin de semana pasado con su novia Jessica Simpson, distracción que ocupó más espacio en los periódicos de Dallas que la lesión de “T.O.”.
Pero si yo fuera aficionado de los Vaqueros, más que esas dos situaciones, que al final del encuentro serán meramente anecdóticas, me preocuparía por la marca de 0-3 en playoffs del entrenador en jefe del equipo, Wade Phillips, quien con todo el talento que tiene a ambos lados del balón y jugando en casa, sencillamente no puede perder este compromiso, ante unos Gigantes que, como buenos gitanos, tras un par de juegazos ya les toca dar uno lamentable.
Me quedo con los Cowboys para imponerse a los neoyorquinos, con base en su buena defensiva, misma que provocará, por lo menos, dos de las clásicas intercepciones alocadas de Eli Manning; sin embargo, creo que los siete puntos y medio que dan en las casas de apuestas son muchos.
Espero sus comentarios en www.mrfootballmex.blogspot.com y en los correos rsanchezl@ova.com.mx y ricksan13@yahoo.com. Hasta la próxima.
Tras lo que vivimos en la temporada regular, en la que los dos mejores equipos de cada Conferencia, Americana y Nacional, estuvieron muy por arriba del resto, creo que en estos playoffs las sorpresas estaban reservadas para los Juegos de Comodines y, si acaso, la única que queda es la que sostengo respecto a que los Potros de Indianápolis vencerán a los Patriotas de Nueva Inglaterra en la final de la AFC, aunque de eso hablaré a detalle hasta la próxima semana.
Seattle en Green Bay
El inexistente ataque terrestre de los Halcones Marinos es su principal obstáculo para pensar en una sorpresa en Lambeau Field, donde el frío, el viento y la dura defensiva de los Empacadores complicará el accionar de Matt Hasselbeck.
La discusión sobre este juego se ha centrado en el duelo entre la dupla de esquineros de los Packers, Charles Woodson y Al Harris, ante el cuerpo de receptores de Seattle, cumplidor, pero carente de un “playmaker”; sin embargo, creo que los locales ganarán la batalla con su frontal, muy eficiente para presionar a los quarterbacks, encabezada por Kabeer Gbaja-Biamila (10 capturas) y Aaron Kampman (12).
La experiencia es la mejor arma de los Seahawks, empezando por su entrenador en jefe, Mike Holmgren, y aunque no creo que pierdan por los nueve puntos que pronostican las casas de apuestas, sí pienso que hasta aquí llegaron.
Jacksonville en Nueva Inglaterra
En algún momento de la temporada regular mencioné que los Jaguares podían eliminar a los Patriotas, pero después de lo que vi la semana pasada en Pittsburgh me retracto, ya que la inexperiencia de los felinos y, sobre todo, la falta de credibilidad en su quarterback, David Garrard, terminarán por hundirlos.
Creo que Jacksonville se mantendrá en la pelea con su dura defensiva y poderoso juego terrestre, pero una vez que Nueva Inglaterra abra la diferencia en el marcador, con los acostumbrados bombazos de Tom Brady a Randy Moss, Garrard no tiene ni el brazo ni el carácter para conducir a los Jaguares a una remontada.
Pese a todo, al igual que en el desafío anterior, considero que los Patriotas no cubrirán la línea de 13.5 puntos por la que son favoritos en Las Vegas.
San Diego en Indianápolis
Todos los analistas hemos hablado de la victoria de los Cargadores sobre los Potros del pasado 11 de noviembre, pero, a mi gusto, éste es el choque más engañoso del fin de semana y, por lo tanto, el único en el que el marcador tendrá una diferencia mayor a 10 puntos. ¿Por qué? Muy simple.
Ni Peyton Manning volverá a lanzar seis intercepciones –de hecho no sufrirá ni una– ni Darren Sproles devolverá dos patadas para touchdown –no pisará las diagonales– ni Adam Vinatieri fallara otro gol de campo tan corto (29 yardas) en caso de que sea el decisivo para la victoria.
Esta vez los Colts están casi completos (la única baja es Dwight Freeney y Marvin Harrison está en duda) y, algo muy importante, jugarán en su domo, donde no hay lluvia ni viento ni frío, por lo que espero una victoria contundente de los campeones defensores, al menos por dos touchdowns de diferencia.
NY Gigantes en Dallas
Este es el partido en el que más colegas apuntan hacia una sorpresa, basados en el estado físico de Terrell Owens, quien intenta recuperarse de un tobillo torcido, pero, sobre todo, porque el quarterback Tony Romo hizo un viaje a México el fin de semana pasado con su novia Jessica Simpson, distracción que ocupó más espacio en los periódicos de Dallas que la lesión de “T.O.”.
Pero si yo fuera aficionado de los Vaqueros, más que esas dos situaciones, que al final del encuentro serán meramente anecdóticas, me preocuparía por la marca de 0-3 en playoffs del entrenador en jefe del equipo, Wade Phillips, quien con todo el talento que tiene a ambos lados del balón y jugando en casa, sencillamente no puede perder este compromiso, ante unos Gigantes que, como buenos gitanos, tras un par de juegazos ya les toca dar uno lamentable.
Me quedo con los Cowboys para imponerse a los neoyorquinos, con base en su buena defensiva, misma que provocará, por lo menos, dos de las clásicas intercepciones alocadas de Eli Manning; sin embargo, creo que los siete puntos y medio que dan en las casas de apuestas son muchos.
Espero sus comentarios en www.mrfootballmex.blogspot.com y en los correos rsanchezl@ova.com.mx y ricksan13@yahoo.com. Hasta la próxima.
1 comentario:
Dos de cuatro mi richard. Andas con la mira descompuesta.
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